Consejos para cuidar tus derechos durante y después del contrato de trabajo
Muchos trabajadores adquieren un compromiso importante con la empresa para la cual laboran, al punto que identifican sus metas personales con las metas de la organización e incluso sacrifican su vida personal y familiar para agradar a su jefaturas. En otras palabras, nuestra clase media y trabajadora tiende a ser muy “camiseteada” con la empresa.
Sin embargo, lo cierto es que el empleador no tiene la misma visión respecto de las personas que trabajan para él. En una organización empresarial las personas son un recurso manejado bajo criterios de eficiencia económica y de control. Por ello, las y los trabajadores pueden ser despedidos de un día para otro, sin importar el nivel de compromiso que tenga la persona, ni los años de servicio que haya cumplido.
Por estas razones, es imporyante no caer en un nivel de ingenuidad tal, que se pase por alto la importancia de llevar la relación laboral con sentido estratégico, protegiendo desde un inicio la vigencia de tus derechos laborales en caso que sea necesario exigir su cumplimiento ante un Tribunal Laboral, ya sea por un despido o por incumplimientos ocurridos durante la vigencia del contrato de trabajo.
Haz bien tu trabajo y se leal contigo mismo
Esto no significa que como trabajador o trabajadora no debas ser leal con tu empresa, ni adquirir un importante compromiso en el cumplimiento de los objetivos para los cuales te contrataron.
Al contrario, es fundamental ser responsable y ético en el ejercicio de tu cargo en la empresa. Pero, al mismo tiempo, también tienes que ser responsable y leal contigo mismo, resguardando el respeto de tu dignidad como persona y tus derechos contractuales dentro de la organización.
A continuación veremos qué tienes que hacer durante la relación laboral y una vez extinguida ésta, para asegurar la vigencia y respeto de tus derechos laborales.
Conserva copia de tu documentación laboral
Es fundamental que conserves copia de toda tu documentación laboral. Es muy importante que guardes una copia de tu contrato de trabajo y de cada uno de los anexos que se vayan firmando en lo sucesivo. También guarda cada una de tus liquidaciones de remuneraciones, y si tu contrato incluye remuneraciones variables, conserva copia de los anexos de cada una de tus liquidaciones.
Si formas parte una organización sindical, obtén copia de tu comprobante de afiliación y copia del contrato colectivo que se encuentre vigente. Asimismo, es relevante que conserves un respaldo del Reglamento Interno de Orden, Higiene y Seguridad, así como las copias de aquellos documentos donde te hayan informado de tu derecho a conocer los riesgos laborales y comprobantes de entrega de elementos de protección personal.
No consideres la enumeración anterior en un sentido taxativo, sino que a modo de ejemplo, o más bien un mínimo de los documentos con los que tienes que contar.
La instrucción es que, en general, tienes que conservar copia de cualquier tipo de documento que se genere durante la relación de trabajo (como evaluaciones de desempeño, si es que estas existen), porque aún cuando tú lo consideres irrelevante, puede que tu abogado encuentre en algún documento una cuestión que resulte determinante para el éxito de tu caso.
Respalda la información
También es importante que, además de guardar una copia física o en papel de estos antecedentes, digitalices cada uno de ellos y almacenes esta información en un disco propio. Y aunque parezca algo exagrado, también respalda todo en una nube como Google Drive, Dropbox o cualquier otra opción que prefieras utilizar.
No puedo recalcar cuán importante será para tu abogado contar con todos estos documentos al momento de analizar una situación compleja, como un despido vulneratorio.
Marcará una diferencia del día a la noche, porque una vez terminado el contrato, te aseguro que en el 99% de los casos tu ex empleador no te entregará ni un solo documento. Esto dejará a tu abogado a ciegas para analizar tu caso, a menos que se inicien medidas prejudiciales para obtener una documentación laboral, lo que, en todo caso, retrasará considerablemente la acción judicial y te dejará expuesto a una posible manipulación de los datos por parte de la empresa.
¿Cómo comunicarme con la empresa durante la relación laboral: Correo electrónico o WhatsApp?
El WhatsApp NO es una forma de comunicación apropiada para una relación laboral. Si bien es ampliamente utilizada, el problema es que no es apta para generar evidencia de buena calidad al momento de ir a juicio. Sus datos se pueden perder con facilidad, No permite guardar sus contenidos de manera fidedigna. Y, además, no es fácil certificar quien envió tal cual o mensaje, ni quien fue su destinatario.
Por estos motivos es que en muchos casos de informalidad laboral, el empleador evita a toda costa utilizar el correo electrónico, recurriendo a llamadas telefónicas, al WhatsApp o medios de comunicación análogos como Telegram, porque así evita dejar registro de que existió un contrato de trabajo.
Lo que Sí corresponde utilizar en una relación laboral, sobre todo para las comunicaciones importantes, es el correo electrónico. Y no cualquier correo electrónico, sino que (en caso de existir) el correo electrónico institucional.
Respalda la información del correo electrónico
Además, es muy importante que respaldes el correo electrónico en un programa que te permita seguir accediendo a su contenido, en caso de que ya no puedas acceder al email, sea porque te despidieron o porque el empleador te lo ha impedido durante la relación laboral.
Para ello, descarga ThunderBird o cualquier otro programa análogo e ingresa al correo de la empresa mediante alguno de estos programas en un computador propio. De esta manera podrás conservar copia de información sumamente relevante para construir una teoría del caso que se apegue a la verdad y sea exitosa en Tribunales.
Constancia en la Dirección del Trabajo
Cuando ocurren situaciones de acoso, discriminación o incumplimientos del contrato, suele pasar que los trabajadores optan por dejar una constancia de los hechos en la Inspección del Trabajo. En este punto es importante que comprendas de qué se trata este documento y qué ventajas y desventajas puede significar.
Primero, hay que dejar en claro que la constancia no es capaz, por sí sola, de probar ningún hecho. Tu podrías ir a la Inspección y decir que tu jefe es un marciano. Y así lo reflejará la constancia, pero naturalmente eso no bastará para probarlo. En otras palabras, en la constancia puedes decir cualquier cosa.
Por otro lado, la constancia no activará ninguna fiscalización por parte de la Inspección del Trabajo, ellos solo cumplirán con entregarte una copia del documento firmado por ti y por el inspector que te tomó la declaración.
Entonces ¿de qué sirve la constancia?
La constancia no es más que una declaración previa. Como tal, la constancia puede servir para reforzar tu evidencia y para decirle al Juez de la causa que la versión de los hechos denunciados ya había sido manifestada por ti mucho antes de demandar, lo que puede sumar credibilidad a tu relato.
Pero es justamente en este punto donde está el peligro de la constancia porque como declaración previa, puede ser muy bien utilizada por el abogado o abogada de la empresa a la hora de contra interrogarte, con el fin de demostrar inconsistencias entre lo que dijiste en la constancia y lo que indicaste en tu declaración en juicio. Por eso, es fundamental que la constancia sea hecha con la asesoría de tu abogado o abogada.
Denuncia en la Inspección del Trabajo
Muy distinto a una mera constancia, es una denuncia en la Inspección del Trabajo. Una denuncia bien hecha puede activar una fiscalización por parte de la Inspección del Trabajo. Y esto podría terminar en una resolución administrativa que constate los hechos denunciados. Además de una multa a la empresa, los resultados de la denuncia pueden servir como una excelente base probatoria para iniciar una acción judicial contra la empresa, como podría ser un autodespido o una tutela de derechos fundamentales.
Pero para que la denuncia conduzca a una fiscalización, debes tener una relación laboral vigente. Además, es importante que ésta sea presentada con buenos fundamentos de hecho y probatorios. Por eso es muy relevante que la denuncia, al igual que la constancia, sea realizada con asesoría legal. Nuevamente aquí resulta sumamente útil contar con toda tu documentación laboral.
¿Cuáles son los riesgos de una denuncia a la Inspección del Trabajo?
Hacer una denuncia en la Inspección del Trabajo no es libre de riesgos. Es muy probable que tu empleador tome represalias en tu contra por haber realizado una denuncia, lo que puede conducir a tu despido.
Este despido no será nulo y quedarás efectivamente desvinculado de la empresa. Pero con esto tendrás buenos fundamentos para iniciar una acción legal por despido vulneratorio, pero NO te da derecho a ser reincorporado.
Asesoría legal de un abogado o abogada
Por último, es importante que te asesores por un abogado laboral tanto mientras esté vigente tu relación laboral como después del despido. Una asesoría constante te permitirá saber qué hacer en caso de incumplimientos, lo que te dejará en mucho mejor pie cuando sea necesario iniciar acciones legales por despido o por otro tipo de incumplimientos.
Como abogado laboral, he asesorado con éxito a muchos trabajadores y trabajadoras, durante la relación laboral y después de sus despidos. Si fuiste despedido o si estás pasando por situaciones de incumplimientos graves, no dudes en contactarme a mi email camilo@abogadojara.cl o al WhatsApp +56 9 8729 5022 para que analicemos tu caso y defendamos tus derechos.