Los honorarios de todo profesional
Todo profesional cobra por sus servicios. No podría ser de otra forma ya que tanto los profesionales independientes, como los trabajadores dependientes necesitan satisfacer sus necesidades. Por lo tanto, no hay abogados ni abogadas gratis, de hecho ni siquiera los servicios de la Defensoría Laboral de la Corporación de Asistencia Judicial son gratuitos para los usuarios. Los abogados de este servicio público reciben mensualmente una remuneración por su trabajo.
Distinto es que algunos abogados y abogadas promocionen sus servicios bajo el eslogan de servicios gratuitos. Pero en realidad lo que están promocionando NO es un servicio gratis, sino que un pacto de cuota litis, según el cual los honorarios del abogado estarán determinados por un porcentaje del monto que se obtenga por juicio o acuerdo.
Lo anterior incluso podría considerarse como una publicidad engañosa, porque el servicio NO es gratuito, ya que hay un costo sujeto al resultado de la gestión.
¿Por qué no deberías contratar a un abogado que ofrece servicios gratuitos?
Fuera del pacto de cuota litis (es decir, el pacto según el cual los honorarios del abogado se determinan por un porcentaje de lo obtenido en juicio), lo cierto es que en realidad n o deberías contratar a un abogado o abogada que ofrece consultas o asesorías gratuitas o de muy bajo costo.
¿Por qué? Porque un consejo profesional, en materia legal, requiere un estudio y análisis previo del caso, que involucra tiempo y dedicación para entregar una respuesta profesional seria y responsable, que logre los objetivos que buscas dentro un marco de ética y legalidad.
Las consultas gratuitas o de muy bajo costo, llevan a respuestas rápidas que buscan confirmar aquello que el cliente quiere escuchar, con el objeto de captarlo para futuros servicios que sí serán cobrados. Esto tiene como consecuencia consejos irresponsables que en varios casos resultan en daños irreparables, o cuya compensación es altamente costosa.
No te imaginas cuantas veces he recibido casos de clientes que por un contrato mal redactado o un consejo liviano, se han tenido que enfrentar a juicios de muy alto costo y de años de duración que podrían haberse evitado del todo con un trabajo legal de mejor calidad.
Cuando un consejo legal gratuito resulta en daños, normalmente otro abogado será el encargado de reparar lo causado por el profesional anterior, lo que significará muchos más gastos para el cliente de los que habría tenido que enfrentar si desde un principio habría optado por servicios pagados y de buena calidad. En otras palabras, lo barato siempre cuesta caro.
Los honorarios del abogado litigante
El abogado litigante es aquel profesional cuya formación y experiencia está en la defensa de los derechos de las personas ante los Tribunales de Justicia. No cualquier abogado está capacitado para realizar este trabajo. La litigación es un área compleja del derecho que no solo involucra conocimientos legales, sino que también, y mucho más importante, implica conocer técnicas de persuasión, de storytelling judicial, de examen directo y de contra examen de testigos, habilidades de investigación de hechos, conocimiento de los Jueces a cargo del caso y de las tendencias de los tribunales, entre varios otros.
Cada una de estas habilidades debe ser cultivadas no solo a través de la experiencia, sino que también mediante el estudio y especialización. De esta forma, el o la litigante serán capaces de defender tus derechos en juicio de manera profesional y objetiva.
Naturalmente que un trabajo complejo y de alta responsabilidad como el de la litigación debe ser retribuido de una manera justa y proporcional. Por lo tanto, los servicios de un litigante no pueden ser gratuitos, ya sea que los honorarios los pague directamente el cliente o haya remuneraciones pagadas a través de una organización pública o privada.
La situación de desempleo del trabajador o trabajadora
Sin embargo, las y los abogados litigantes que hemos tomado la decisión de defender a las y los trabajadores en juicio sabemos que, en muchos casos, los trabajadores no tienen recursos suficientes para enfrentar un juicio. Por eso es que con el fin de asegurar el derecho de acceso a la justicia de la clase trabajadora, ofrecemos como alternativa de pago el pacto de cuota litis, en vez de un pago fijo por la representación judicial.
El pacto de cuota litis
El pacto de cuota litis (irresponsablemente promocionado por algunos colegas como un sistema de trabajo legal gratuito) consiste en el pacto de un porcentaje de los montos que se logren obtener mediante sentencia judicial, o por acuerdo dentro o fuera del procedimiento. En materia laboral, el porcentaje normalmente asciende al 30% de la cantidad obtenida, lo que es recibido por el abogado una vez que se concrete el pago de la indemnización por parte de la empresa.
Es un pacto sumamente riesgoso para el profesional porque si el juicio no tiene éxito, su trabajo habrá sido en vano. Sin embargo, este pacto también es riesgoso para el cliente porque el hecho de que el profesional ligue sus honorarios al éxito del juicio, lo hace perder objetividad en cuanto al mérito del caso, lo que puede llevar al abogado a presentar en Tribunales demandas infundadas que se sostienen únicamente en la esperanza de obtener un monto determinado de dinero.
Por eso es importante que antes de llevar la causa a juicio, se haga un estudio objetivo del caso, para determinar si hay mérito suficiente para ir a juicio o no, lo que aminora el riesgo de cometer un error por sesgo de confirmación.
Conclusiones
Cuando veas avisos de abogados gratis, y en general de cualquier otro servicio profesional gratuito, piénsalo dos veces. Normalmente un buen profesional no trabaja gratis, así como ningún servicio de buena calidad lo es. Asegúrate de averiguar cuál es la formación académica del profesional y los resultados concretos que ha obtenido en sus juicios, para luego tomar una decisión responsable e informada de la que luego no tengas que arrepentirte.
En mi caso, Sí cobro por mis servicios. No trabajo de forma gratuita. Sin embargo, sí ofrezco, en materia laboral, el pacto de cuota litis para la generalidad de las y los trabajadores a quienes represento, previo análisis del mérito del caso. De esta forma, aporto a garantizar el acceso a la justicia de la clase trabajadora, con un sistema de honorarios justo que me permita continuar mi perfeccionamiento para ofrecer servicios legales del más alto nivel profesional.